viernes, 21 de enero de 2011

Signos de puntuación

Hemos estado revisando algunos de los signos de puntuación más usados en el idioma español. Cuando hablamos de los recursos prosódicos de la comunicación oral (entonación, volumen y pausas), notamos cómo influyen no sólo en la impresión que nos genera el orador sino el impacto que tiene en la recepción del mensaje. De la misma forma, los signos de puntuación son los recursos que tenemos en la comunicación escrita para dar cierto ritmo y lógica gramatical a lo que escribimos. Sin ellos, el mensaje sería confuso o ilegible, se perdería el sujeto de la acción y no estaríamos muy seguros de comprender la idea. Si bien, el no utilizar la puntuación se considera una falta de redacción, en ocasiones puedes considerarse una cuestión de estilo. Escritores como José Saramago (premio Nobel de Literatura, 1998), caracterizan sus novelas por el no uso de algunos signos. Para lograr esto es neceasrio conocer a la perfección las reglas gramaticales para que, una vez dominadas, las sometamos a las necesidades del mensaje del autor.

Les pongo un breve framgmento de "El cuento de la Isla desconocida" de José Saramago para que conozcan este tipo de escritura transgresora:

Un hombre llamó a la puerta del rey y le dijo, Dame un barco. La casa del rey tenía muchas más puertas, pero aquélla era la de las peticiones. Como el rey se pasaba todo el tiempo sentado ante la puerta de los obsequios (entiéndase, los obsequios que le entregaban a él), cada vez que oía que alguien llamaba a la puerta de las peticiones se hacía el desentendido, y sólo cuando el continuo repiquetear de la aldaba de bronce subía a un tono, más que notorio, escandaloso, impidiendo el sosiego de los vecinos (las personas comenzaban a murmurar, Qué rey tenemos, que no atiende), daba orden al primer secretario para que fuera a ver lo que quería el impetrante, que no había manera de que se callara. Entonces, el primer secretario llamaba al segundo secretario, éste llamaba al tercero, que mandaba al primer ayudante, que a su vez mandaba al segundo, y así hasta llegar a la mujer de la limpieza que, no teniendo en quién mandar, entreabría la puerta de las peticiones y preguntaba por el resquicio, Y tú qué quieres. El suplicante decía a lo que venía, o sea, pedía lo que tenía que pedir, después se instalaba en un canto de la puerta, a la espera de que el requerimiento hiciese, de uno en uno, el camino contrario, hasta llegar al rey. Ocupado como siempre estaba con los obsequios, el rey demoraba la respuesta, y ya no era pequeña señal de atención al bienestar y felicidad del pueblo cuando pedía un informe fundamentado por escrito al primer secretario que, excusado será decirlo, pasaba el encargo al segundo secretario, éste al tercero, sucesivamente, hasta llegar otra vez a la mujer de la limpieza, que opinaba sí o no de acuerdo con el humor con que se hubiera levantado.

1. ¿Cuáles son los signos de puntuación que predominan?
2. ¿Cuáles son los que omite?, ¿Por qué?
3. ¿Cuál es el efecto que te produce a ti como lector?, ¿qué diferencia tendría si estuviera escrito de modo tradicional?
4. Después de conocer esta pequeña probada del texto ¿leerías el cuento completo? ¿Por qué?
Antes de despedirme, les adjunto un link que les puede ser útil para citar las fuentes bibliográficas de su trabajo de investigación. La página es: www.easybib.com/ebook

Carpe diem
(Aprovecha tu día)